A veces es necesario romper, perderse entre la incertidumbre y el recuerdo. Por qué hay días donde la casa huele a nostalgia, y hay un cartel de venta colocado en el alma. Una ventana que da a una ciudad caótica, con música triste sonando al ritmo del corazón de fondo. Un corazón que rompe en llanto mientras baila lentamente, y un cuerpo tirado en el sofá. Levantas ese cuerpo y cuelgas tu alma en el perchero, dejas tu corazónen un libro. Pero un día te miras al espejo y crees en esa mirada, ves ese reflejo sonreír y le dices que lo apuestas todo por esa persona.
Esta obra es una expresión visceral de la condición humana, palpable en cada pincelada. Utilicé acrílicos con dorados y objetos sobre yeso para reflejar la profundidad del alma que lucha y emerge triunfante. El estilo expresionista permite que las emociones fluyan libremente, creando una intensa narrativa visual. Cuando lo mires, sentirás una conexión energética que llenará tu hogar de pasión y resiliencia.
